
Un gran incendio se desató en una sinagoga del barrio Ramot de Jerusalén, en medio del mismo, los bomberos trabajaban para abrir el Arca de la Alianza para recuperar los libros sagrados de la Torá y salvarlos de las llamas
Mientras apagaban el Arca, el encargado de la sinagoga estaba parado cerca, llorando amargamente. Después de muchos minutos, el arca fue quemado y los bomberos tuvieron el honor de sacar los libros de la Torá de la sinagoga. Y fue un momento inolvidable.